miércoles, 23 de octubre de 2013

NOS VEMOS...

Temporalmente estaré 

ausente de Internet, 

agradezco a todos, amigas y 

amigos que han 

seguido las publicaciones. 

Espero estar 

pronto de regreso. Un 

abrazo.

lunes, 21 de octubre de 2013

SIN QUE ME IMPORTEN LAS PALABRAS...

No estábamos al comienzo
ya lo sé  pero mantengo las preguntas.
Quiero saber el mecanismo
las razones extrañas que confunden
las manecillas locas de esa fuerza
llamada corazón.
Querer y no querer.
Abrir los brazos y escapar. 
Estar feliz y que te duela.
Dime qué marcha mal
que idioma hablas en lo oscuro
para que yo me pierda en las palabras
confunda las respuestas
y prefiera otra vez la soledad.
No quiero lastimar
tampoco lastimarme
pero habrá que elegir.
Los amigos vendrán a convencernos
sacarán nuestras manchas a la luz
 y acusarán a un hombre enfermo
sin saber  sin entender
que sin dolor el sueño muere
que la verdad y la mentira juegan a venir
levantándose un muro
para así no ver la realidad.

Manuel Enrique Valls
(1993-1995)

viernes, 18 de octubre de 2013

LAS LÁGRIMAS

"Cuando echado del nido de la eternidad,
el primer hombre
pasaba asombrado y pensativo por los bosques y campos,
le apenaba la luz,
las nubes, el horizonte -y de cualquier flor
 le punzaba un recuerdo del paraíso.
Y el primer hombre, el errante, no sabía llorar.
Una vez, agotado por el azul tan claro
de la primavera,
con alma de niño el primer hombre
cayó de cara al polvo:
"Padre, arráncame los ojos
o si te es posible fabrica sobre ellos
una telaraña, una mortaja
para que no vea más
ni flor, ni cielo, ni sonrisa de Eva, ni las nubes
porque toda esa luz me duele".
Entonces, el piadoso, en un instante
de misericordia
le dio las lágrimas.

Lucian Blaga (Rumanía).

LAS "AGUAS" de AMAURY

"Que me equivoque y vuelva andar en desaliño, contrabandeandole al cariño corazones,
un viento que vino agresivo, inoportuno
enamorando cada hendija de la noche.

Que me equivoque y vuelva a ser piedra de río,
inconmovible contra el paso de la lluvia,
un privilegio del suspiro, un condenado
al duro golpe del olvido en la armadura.

De eso nada amiga mía, de eso nada,
no va la bohemia a clausurarme las heridas,
y la canción que no me ataje la garganta,
no es la canción que irá llevarme a la otra orilla.

De eso nada amiga mía, de eso nada,
porque le falta condición y sobran años
y espero un hijo que alimente mi cordura
justo hacia el borde irrepetible del verano.

Que me confunda mariposas y vestidos
hasta obligar la travesía de los sueños
y vuelva atrás los ojos limpios de fortuna,
escudriñando el corazón del universo.

Que me equivoque y deje huir lo que las aguas
fueron puliendo alrededor de mi quebranto,
no queda edad para el riesgo desmedido
y del fracaso no quisiera otro zarpazo.

De eso nada amiga mía, de eso nada,
aun queda más que el lento paso de los días,
que al loco caminar, un tonto tropezar
y no quisiera a estas alturas la caída.

De eso nada amiga mía, de eso nada,
tengo equilibrios, tengo azares y consuelos,
y a fuerza de aventuras la piel se nos madura
y viene el desaliento... y viene el desaliento.


Amaury Pérez Vidal
(1979)

miércoles, 16 de octubre de 2013

COMO AQUEL HOMBRE SIN LUGAR...

"Como aquel hombre sin lugar
vago entre poemas y besos de lujo,
me encierro en un sueño
y mastico los días
hasta hacer las noches.
Mis caminos son diversos, abiertos y claros
solamente mis pies alguna vez pesan
y mis ojos se ciegan de luz.

Como aquel hombre sin lugar
temo al tiempo,
guillotina que cortará algún día mis pasos,
y cubrirá de hierba mis caminos.
Mis caminos diversos, abiertos y claros,
hacia el mundo y desde el mundo,
tortuosos y trazados sobre secos suelos.
Temo al amor también
con sus cadenas fuertes
que algún día podrán
soldarme a este pulido piso
y cosechar en tierra fácil
lo que corresponde a seca arena.

Quiero del tiempo
 años que me crezcan
entre semillas y lluvias,
segundos que fusilen los años
o años que fluyan eternos.
Quiero del amor
un reflejo de mariposas
que me vuelen el cuerpo
 y luego se remonten a sus flores
llevándole mi perfume en su perfume...

Como aquel hombre sin lugar
me muerde el hambre de los niños
y la muerte de alguien me golpea el instinto,
un grito de libertad me araña la garganta,
mis manos son fusil,
y mis labios esperanza.

De mí
quiero puños de hierro,
voluntad de gigante
y ojos que lleguen hasta lejos.
De ti,
 tu despertar en las mañanas
y tus diminutos dientes clavados en mi carne.
De ese libro, lo que murmura mi sangre
y el principal camino.
De mi piel
ese filtro a las lenguas de la gente
 y como aquel hombre sin lugar
 me entrego al mundo
a cambio de un poema
que yo mismo escribo.

Todo lo doy, nada pido
o quizá que me dejen ser yo mismo
a cambio de esa vida que nace de mis células
 y se cuece en el horno de los caminos.
Mis caminos diversos, abiertos y claros.
Diversos como mis sueños,
abiertos como mis ojos,
y claros como aquel beso.
Y como aquel hombre, no deseo un lugar,
sólo un camino...".

F.E.
(Febrero, 2, 1982)

COSTUMBRE

"Ya me acostumbré a tí
como la noche al silencio,
como la brisa a este invierno
que deja los parques solitarios.

Ya me acostumbré a tu presencia,
cuando apenas te conocía;
se me antoja que serán ahora
más pequeñas las horas.

Ya tengo ganas de saberte
entre mis células,
para que nunca más se separe
de mí esta costumbre".


Ernesto G. F.
(Manzanillo, 7 de diciembre de 1987)

"En el mundo hay gente linda, y uno puede encontrarlos casi por azar, en cualquier sitio. Entonces se hace inevitable convertirlos en parte de nosotros. Entonces se hace nueva en ellos, la palabra amigo. Así conocí a Ernesto, un día de diciembre...".

martes, 15 de octubre de 2013

ERES EL CAPITÁN DE TU VIDA.....

 Vamos montados en el mismo barco
Y navegando por los mismos mares;
Los mismos peces nos guiñan a veces,
Todo es igual, aunque parezca diferente.
Yo estoy en proa y tú vas debajo,
Mirando cómo alcanzar mi sitio,
No sé si es valor lo que te falta,
O decisión para lanzar el grito.
A veces cuando paso me saludas,
Mas solo es un momento la explosión;
Todo vuelve a quedar como una duda,
Colgada en la mitad del corazón.

Decídete, que sin mover un dedo
No llegarás muy lejos, jamás me alcanzarás.
Decídete, qué dirá tu conciencia
Si falta la experiencia, de ser capitán.

Vas navegando sobre aguas profundas
Sobre las cuales debes siempre andar,
Y si no quieres que ellas sean tu tumba,
Debes muy pronto aprender a nadar.
Decídete, y enfréntate a la vida,
Di lo que sientes si esa es tu verdad,
Y no te importe recibir heridas,
Si ser así te trae felicidad.
Y la próxima vez que nos veamos
Acaba de anunciar tu decisión:
Sube conmigo aquí, al puente de mando,
Alza las velas de tu corazón.

Decídete, navegarás con suerte,
Que no podrá la muerte con todo ese caudal
De mil deseos guardados
Que al fin se han desbordado y ocupan su lugar.
Decídete, y marcarás el rumbo,
para andar por el mundo cual todo un capitán.


                                                              
 Manuel Enrique Valls 
(1982)

TERESA, ENAMORADA DE JESÚS.

"Ya toda me entregué y di,
y de tal suerte he trocado,
que mi Amado es para mí
y yo soy para mi Amado.

Cuando el dulce Cazador
me tiró y dejó herida,
en los brazos del amor
mi alma quedó rendida;
y, cobrando nueva vida,
de tal manera he trocado,
que mi Amado es para mí
y yo soy para mi Amado.

Hirióme con una flecha
enherbolada de amor,
y mi alma quedó hecha
una con su Criador;
Ya yo no quiero otro amor,
pues a mi Dios me he entregado,
y mi Amado es para mí

y yo soy para mi Amado".

Teresa de Jesús.

viernes, 11 de octubre de 2013

YO TE CONOZCO BIEN...

Este es el poema que escribió un amigo hace años, dedicado a Sinead O´Connor; creo que vale para todas esas voces que han cantado la banda sonora particular de la vida de cada uno....

Yo conozco esa voz tan sutil de mañana
que guarda las miradas largas e inexplicables,
que aparece en el mundo defendiendo su mente
con ideas fundidas de agrietadas verdades.

Yo conozco inconforme mis pasos casi tuyos
y aunque no sabes nada de estos versos estúpidos,
yo te conozco bien, florecilla problemática,
aunque tus gestos siempre parezcan ser tan únicos.

Yo sé que no te gusta lo que puedes tener,
también sé que la fama te ha traído problemas;
bien sabes que yo existo y confiado lo creo,
tú no sabes mi nombre pero sabes mis penas.

Que se eleve tu voz censurándolo todo,
que desbarate toda la sucia hipocrecía,
que perfore el silencio de tanto miedo junto.
¡Ojalá pueda darte las gracias algún día!

Jorge PALMER
(Abril de 1992)

jueves, 10 de octubre de 2013

EN NOSTALGIA....

"Tú que me injertas caminos
de distancias infinitas,
¿Con cuánta piel acreditas
la agudeza de tus trinos?
Dí cómo filtran mis vinos
por tus conceptos alados,
quedando purificados
 y en cristalinos atuendos,
para acabar en remiendos
de sueños mal terminados.

Tú que me llenas de flores
eternas en primavera,
que me libras de fronteras
cuando pregonas amores;
no sabes los sinsabores
que ocasiona tu partida,
 ni cómo queda mi vida
al conocer de tu viaje.
Nostalgia, dí, ¿Cuál brebaje
ha de curarme esta herida?"

José Armas

miércoles, 9 de octubre de 2013

OPTIMISMO TRÁGICO

“No hay más que un problema filosófico verdaderamente serio: el suicidio. Juzgar que la vida vale o no vale la pena de ser vivida es responder a la pregunta fundamental de la filosofía” 
(Albert Camus)


“Hay muchos que mueren demasiado tarde y algunos que mueren demasiado pronto. Aún nos resulta extraña esa máxima que aconseja morir a tiempo” 
(Nietzsche)


“La mejor razón para no quejarse de la vida es que ella no retiene al que la quiera dejar. Las cosas humanas están muy bien dispuestas: nadie es desgraciado más que por su culpa. ¿Te place la vida? Vive. ¿No te place?, pues eres dueño de volver al lugar de donde has venido”. 
(Séneca). 


“He pensado en suicidarme pero creo que no lo necesito. En cualquier momento el tiempo me suicida” 
(Borges)

(Tomado de:LA Pupila Insomne-cine cubano, FB)

lunes, 7 de octubre de 2013

GRACIAS.... un poema de BORGES.

Gracias quiero dar al divino
laberinto de los efectos y las causas
por la diversidad de las criaturas
que forman este singular universo,
por la razón, que no cesará de soñar
con un plano del laberinto,
por el rostro de Elena y la perseverancia de Ulises,
por el amor, que nos deja ver a los otros
como los ve la divinidad,
por el firme diamante y el agua suelta,
por el álgebra, palacio de precisos cristales,
por las místicas monedas de Ángel Silesio,
por Schopenhauer,
que acaso descifró el universo,
por el fulgor del fuego 
que ningún ser humano puede mirar sin un asombro antiguo,
por la caoba, el cedro y el sándalo,
por el pan y la sal,
por el misterio de la rosa
que prodiga color y que no lo ve,
por ciertas vísperas y días de 1955,
por los duros troperos que en la llanura
arrean los animales y el alba,
por la mañana en Montevideo,
por el arte de la amistad,
por el último día de Sócrates,
por las palabras que en un crepúsculo se dijeron
de una cruz a otra cruz,
por aquel sueño del islam que abarcó
mil noches y una noche,
por aquel otro sueño del infierno,
de la torre del fuego que purifica
y de las esferas gloriosas,
por Swedenborg,
que conversaba con los ángeles en las calles de Londres,
por los ríos secretos e immemoriales
que convergen en mí,
por el idioma que, hace siglos, hablé en Nortumbria,
por la espada y el arpa de los sajones,
por el mar, que es un desierto resplandeciente
y una cifra de cosas que no sabemos
y un epitafio de los vikingos,
por la música verbal de Inglaterra,
por la música verbal de Alemania,
por el oro, que relumbra en los versos,
por el épico invierno,
por el nombre de un libro que no he leído: 
Gesta Dei Per Francos, 
por Verlaine, inocente como los pájaros,
por el prisma de cristal y la pesa de bronce,
por las rayas del tigre,
por las altas torres de San Francisco 
y de la isla de Manhattan,
por la mañana en Texas,
por aquel sevillano que redactó la Epístola Moral
y cuyo nombre, como él hubiera preferido, ignoramos,
por Séneca y Lucano, de Córdoba,
que antes del español escribieron
toda la literatura española,
por el geométrico y bizarro ajedrez,
por la tortuga de Zenón y el mapa de Royce,
por el olor medicinal de los eucaliptos,
por el lenguaje, que puede simular la sabiduría,
por el olvido, que anula o modifica el pasado,
por la costumbre,
que nos repite y nos confirma como un espejo,
por la mañana, que nos depara la ilusión de un principio,
por la noche, su tiniebla y su astronomía,
por el valor y la felicidad de los otros,
por la patria, sentida en los jazmines
o en una vieja espada,
por Whitman y Francisco de Asís, 
que ya escribieron el poema,
por el hecho de que el poema es inagotable
y se confunde con la suma de las criaturas
y no llegará jamás al último verso
y varía según los hombres,
por Frances Haslam, que pidió perdón a sus hijos
por morir tan despacio,
por los minutos que preceden al sueño,
por el sueño y la muerte,
esos dos tesoros ocultos,
por los íntimos dones que no enumero,
por la música, misteriosa forma del tiempo.


Jorge Luis BORGES

viernes, 4 de octubre de 2013

NECESITO AMIGOS

Yo también quisiera
confiarte un secreto,
como guardo el tuyo
guárdalo muy dentro.

Necesito amigos, necesito manos,
Necesito abrigo, necesito hermanos,
 a veces no puedo con la soledad.

Me haces mucha falta
porque no tenerte
es como si el aire
falta de repente.

También me haces falta
para andar los sueños,
y vencer el miedo
que le tengo al tiempo.

Y perdona acaso
si repito cosas
que antes escuchaste
en miles de bocas.

Necesito amigos, necesito manos,
 necesito abrigo, necesito hermanos, 
a veces no puedo con la soledad.

Manuel Enrique Valls
(1986)

miércoles, 2 de octubre de 2013

FRAGILIDAD

¡Qué frágil me descubro!
Cuando acaricio mis huesos
escandalosamente asomados a mi piel
siento a merced del viento de la vida
mi poquita esperanza.
Esta desnuda humanidad
como larga cadena que me impide el vuelo
suele causarme dolores de cabeza
saltos en el estómago
sentimientos de culpa
y mucho miedo a veces
mucho miedo
al comprender frente al espejo
que un hombre es el desánimo
el animal cercado por la suerte
el buscador constante de la vida
frente al susto vital de saberse finito.

Acaricio mi cráneo  mi mandíbula
mis costillas  mi abdomen
mis misterios
acaricio mi muerte.
Un escalofrío me recorre el cuerpo
¡Oh Dios qué frágil me descubro!

Manuel Enrique Valls
(1995)

RETRATO DEL ABISMO

Todo hombre y toda mujer es un abismo
al fondo de ese abismo encontramos a Dios.
Y todo abismo supone oscuridad
y también supone incertidumbre
supone la caída y supone el vértigo
mientras luz y tinieblas
pasan ante los ojos.
Es que nosotros somos el infierno
tanto como somos el paraíso
es que al principio estuvimos desnudos
y al final acabaremos probando la manzana.
Padre  gritamos todos al cierre de la vida
y sentimos las espinas en la sien 
y el dolor de los clavos.
No hay otra manera de entendernos.

Manuel Enrique Valls
(1995)

martes, 1 de octubre de 2013

APRENDER A MORIR...

 Jean Guitton nació en 1901 en Francia; escritor y filósofo, fue elegido miembro de la Academia Francesa de Letras, y también integró la Academia de Ciencias Morales y políticas, y además, el único laico autorizado a sesionar en el Concilio Vaticano II. En el libro “Mi testamento filosófico”, publicado en español por Editorial Sudamericana, 1999 su autor escenifica de modo magistral los últimos momentos de su vida, y en unos diálogos geniales con Pascal, Dante, Bergson, Pablo VI, Teresa de Lisieux y Francoise Mitterrand, entre otros, nos habla de sus razones para creer, para ser cristiano y para ser católico. No es un libro apologético ni mucho menos, nada de eso, es una reflexión acerca de la fe y las dudas, y de los interrogantes ancestrales a los que el ser humano se enfrenta.
Como estímulo les va este pasaje:

“San Pedro me interrogó primero.
- Jean Guitton, ¿Qué has hecho de tu vida?
- He filosofado.
- ¿Qué quiere decir eso?
- He aprendido a morir.
- ¿Cómo lo aprendiste?
- Mirando a Cristo.
- ¿Quién te enseñó a mirarlo?
- La que le dio la vida y lo vio morir en la cruz. Ella fue quien me enseñó.
- ¿Cómo te lo enseñó?
- Mientras escribía un libro acerca de ella.

San Juan tomó la palabra. Él es mi santo patrono. La víspera del día en que Jesús sufrió, él reposó su cabeza en el pecho del Señor. Tal fue el sacramento por el cual recibió el conocimiento de lo insondable. Yo lo amaba. Cien años que me hablaba de ta tou kuriou pneumatika. (“Todo lo que llenaba el espíritu del Señor”) Y ahora lo veía. Su voz era más firme de lo que yo hubiese creído. Su estatura más alta. Su rostro irradiaba la luz de la Verdad.
Jean – me preguntó- ¿Qué es morir?
- Es perderlo todo, abandonarlo todo y abandonarse en manos de Dios.
- ¿Por qué es importante morir?
- Porque es el único momento de la vida en que se puede dar absolutamente todo y sin retorno.
- ¿Y qué es vivir bien?
- Es vivir cada instante como se moriría si se muriera bien.
- ¿Qué es morir bien?

Miré a Santa Teresa de Lisieux y la respuesta me vino, fulgurante:
-Morir de Amor.
-Jean, ¿Qué es el amor?
-Amar es darlo todo y darse uno mismo.

San Juan se ensimismó. Ozanam preguntó:
- Jean, ¿Es triste morir?
- Es triste para los demás.
- ¿Y para uno mismo?
- Es triste, si pensamos en la tristeza de los otros.
- Jean, ¿Has muerto triste?
- Quise perseverar en la alegría.”