martes, 9 de abril de 2019

PARA VIVIR LA SEMANA SANTA...

Hoy quiero volver a compartir algunas ideas en torno a la Semana Santa, publicadas hace tiempo ya, en este mismo blog, y parto de esta idea: todo el Triduo Sacro es expresión de la ley fundamental de nuestra vida, de lo que somos, de lo que implica vivir; por eso debemos celebrar esos días con particular atención, participando de la liturgia, pero también reflexionando a nivel personal. Recuerda bien: vale detenerse en los símbolos que aparecen durante estos días: el pan y el cáliz, el lavatorio de los pies, la cruz, el Monumento, el sepulcro, la oscuridad y la luz, etc; cada uno de ellos son, al mismo tiempo, referencias de nuestra vida e imágenes de nuestra salvación.

Si en estos días acompañamos a Jesús en su camino de Pasión, muerte y resurrección, recorreremos al mismo tiempo la ruta de nuestra propia autorrealización humana, y lo haremos en cuatro momentos. Prestemos atención:

1. Jueves Santo…….ACEPTACIÓN.

2. Viernes Santo…….ABANDONO.

3. Sábado Santo……UNIFICACIÓN.

4. Pascua……RENOVACIÓN.

Explicar esto detalladamente supondría mucho tiempo y espacio, pero intentaré resumirlo de alguna manera.

ACEPTACIÓN: En la última Cena somos plenamente acogidos y aceptados por Jesús; Él nos sienta a su mesa, señal de fraternidad, nos lava los pies, nos invita a vivir y celebrar la Vida. No hay nada en nosotros que Él no acoja y bendiga; Él se hace totalmente nuestro, se entrega. Por ello también nuestra vida ha de ser como la de Jesús: acogedora, abierta, servicial, entregada. Aceptar nuestra humanidad, en la que el Hijo de Dios quiso encarnarse, y mostrarnos que ese es el camino por el que Dios viene a nosotros.

ABANDONO: Jesús se debate, inquieto en el Huerto de los Olivos, pero acaba entregándose al Padre totalmente. Expresión de confianza absoluta, que implica incluso aceptar la muerte en medio de la incertidumbre y del desamparo. Es la respuesta que debemos dar nosotros en cada momento de nuestra vida a la pregunta: ¿Está o no está aquí y ahora Dios con nosotros? Eso es la fe, confiar en que estamos totalmente en sus manos.

UNIFICACIÓN: Dice Jesús…"Si el grano de trigo no cae en tierra y muere...”. Morir para vivir. Aguardar en oscuridad y silencio, “Sé que mi Redentor vive...”. Ese es el tiempo en que la semilla aguarda en lo hondo de la tierra. Ahí soy purificado para poder comenzar una vida nueva….soy unificado.

RENOVACIÓN: Y así llega la Primavera, y con ella el tiempo de florecer de nuevo, de resucitar con Cristo. La muerte ha sido vencida, y lo será una y otra vez hasta la definitiva, cuando volvamos al Uno, de donde salimos. 

Si te detienes a pensar en cada uno de estos pasos te darás cuenta de que acontecen muchas veces a lo largo de tu vida, y de que toda tu vida expresa este misterio, que es el MISTERIO DE CRISTO que celebramos domingo tras domingo, y que celebraremos de modo particular durante las próximas jornadas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.