sábado, 28 de marzo de 2015

HOSANNA AL EXCLUÍDO, AL FIEL


"Jesús contó con la posibilidad de un final violento. No era un ingenuo. Sabía a qué se exponía si seguía insistiendo en el proyecto del Reino de Dios. Era imposible buscar con tanta radicalidad una vida digna para los pobres y los pecadores sin provocar la reacción de aquellos a los que no interesaba cambio alguno. "

“Jesús no fue un suicida ni buscaba el martirio. Nunca quiso el sufrimiento ni para él ni para nadie. Dedicó su vida a combatirlo en la enfermedad, las injusticias, la marginación o la desesperanza,. Vivió entregado a ‘buscar el reino de Dios y su justicia’ : ese mundo más digno y dichoso para todos, que busca su Padre…No corre hacia la muerte, pero tampoco se echa atrás. No huye ante las amenazas, tampoco modifica ni suaviza su mensaje…Le habría sido fácil evitar la ejecución. Habría bastado con callarse y no insistir en lo que podía irritar en el templo o en el palacio del prefecto romano. No lo hizo. Siguió su camino. Prefirió ser ejecutado antes que traicionar su conciencia y ser infiel al proyecto de Dios, su Padre…Morirá fiel al Dios en el que ha confiado siempre. Seguirá acogiendo a todos, incluso a pecadores e indeseables. Si terminan rechazándolo, morirá como un “excluído” pero con su muerte confirmará lo que ha sido su vida entera: confianza total en un Dios que no rechaza ni excluye a nadie de su perdón.”
J.A. PAGOLA. "Domingo de Ramos"

viernes, 20 de marzo de 2015

MOMENTO DE REDESCUBRIRSE

"Considerar la Cuaresma como algo deprimente, inhibidor o sombrío significa no comprender que una parte de la decepción que supone la vida proviene de exigirle que sea siempre un éxtasis, continuamente fácil, cada vez más emocionante.

La idea de que la vida espiritual es una especie de constante que puede alcanzarse con facilidad y mantenerse fielmente, es un signo de inmadurez espiritual. O cambiamos nuestro modo de ver la vida y a Dios, a medida que maduramos, o acabaremos siendo una especie de residuo religioso de
una era anterior a la nuestra.

«Ya no soy / lo que he sido», decía el poeta Byron. La verdad es que cambiamos de de un año para otro, de una época de la vida para otra. La vida nos exige estar en contacto con nosotros mismos para no perdernos. La Cuaresma pretende ser el momento del redescubrimiento personal, un momento en que descendemos al centro de nuestro ser para ver lo que queda, lo que falta, lo que está en germen.

La Cuaresma es siempre una llamada a la conversión. La conversión no es una llamada a ser algo distinto de lo que somos, sino una llamada a ser más plenamente lo que hemos de ser."

JOAN CHITTISTER. Escuchar con el corazón



jueves, 12 de marzo de 2015

PAUSA

“La velocidad con que vivimos, la rapidez de los cambios que experimentamos, nos obliga a movernos con agilidad… Necesitamos introducir en nuestra vida pausas para no ser diluídos en  la velocidad que nunca se detiene. En la pausa se sedimenta lo que vale y se evapora la espuma La inercia de nuestro movimiento, el ritmo de los que viven a nuestro lado y los estímulos que llegan desde fuera nos seducen y se sitúan un metro delante de nosotros, creando un vacío que nos succiona y nos arrastra, haciendo que nos resulte difícil detenernos.  Nuestros sentimientos, pensamientos, entrañas y relaciones, se vuelven impacientes. Pasamos por la superficie de las personas y de las situaciones como aguacero que se precipita y erosiona sin empapar la tierra. Nuestros abrazos se quedan a medias, y nuestras respuestas se comen las palabras. Cuando ya no tenemos tiempo para nada, ni siquiera para comer (Mc.6,31) es cuando más necesitamos salir al borde del camino, y detenernos.

En algunas ocasiones, nuestro organismo enferma para obligarnos a parar y asentar la vida. Después de una pausa grande, salimos con otra visión de la realidad mucho más sabia y respetuosa de nosotros mismos y de los demás. Grandes aportaciones humanas han salido de vidas detenidas en cárceles, hospitales y destierros.

La cultura nos propone vivir la urgencia y la pausa como dos momentos separados. Primero nos llenamos de estrés y después nos derrumbamos en una playa. A veces vivimos en una alternancia la prisa y el descanso…Pero lo ideal es que las dos dimensiones se vayan integrando en la vida cotidiana… La pausa debe viajar en la entraña de la urgencia. "

Benjamín González Buelta. Caminar sobre las aguas.


jueves, 5 de marzo de 2015

ARENA O PIEDRA


“Dice una leyenda que dos amigos viajaban por el desierto. En un determinado punto del viaje, discutieron y uno golpeó al otro. El ofendido escribió en la arena:
'Hoy mi mejor amigo me ha pegado una bofetada'
Siguieron adelante y llegaron a un oasis donde decidieron bañarse. El que había sido abofeteado comenzó a ahogarse, y fue salvado por el amigo.  Al recuperarse, tomó un estilete y escribió 
en una piedra:
'Hoy mi mejor amigo me salvó la vida'
Intrigado, el mejor amigo preguntó ¿por qué, después de pegarte escribiste sobre la arena y ahora escribes sobre una piedra?. El otro respondió:
Cuando un gran amigo nos ofende, debemos escribir en la arena, donde el viento del perdón y el olvido  acaban borrándolo. Pero cuando nos pasa algo grandioso debemos grabarlo en piedra, grabarlo en la memoria del corazón, donde ningún viento puede borrarlo.”

ALEJANDRO CÓRDOBA.